La prensa oficialista cubana ha actualizado sobre los casos de influenza aviar confirmados en el mes de febrero en el Zoológico de La Habana.
Según Cubadebate, el Centro Nacional de Sanidad Animal (Cenasa) aseguró en fecha reciente que no se han registrado nuevos casos positivos ni sospechas de influenza aviar en los animales del Jardín Zoológico de La Habana. Allí, en el mes de enero, se debieron adoptar medidas de cuarentena tras la detección del virus en aves silvestres.
Una nota informativa de la entidad perteneciente al Ministerio de la Agricultura refiere que la “situación se encuentra bajo control”. Igualmente, señalan que continúan trabajando en “acciones recuperativas que una vez concluidas permitirán dar por finalizada la campaña de control sanitario en la referida instalación”.
El Minag mantiene un Grupo de Trabajo Temporal en funcionamiento para “el chequeo permanente”. La idea es “recuperar la situación y poder restablecer los servicios en el establecimiento, conocido como Zoológico de 26”, indica el comunicado.
Entre las medidas adoptadas en el centro, se realizaron trabajos de limpieza y desinfección en las áreas afectadas, el drenaje de las lagunas, y la protección y vigilancia de animales susceptibles.
También, se efectuaron actividades de “centinelización y repoblación”, según la nota de Cenasa.
INFLUENZA AVIAR EN ZOOLÓGICO DE LA HABANA
El primer paso luego de la detección de la influenza aviar, fue establecer una cuarentena en el Zoológico, para evitar la propagación del virus en aves de traspatio y granjas comerciales. Se hicieron “estrictos controles de seguridad destinados a evitar contagios de animales a humanos”, precisa la autoridad.
De acuerdo a precisiones del Cenasa, las aves silvestres son consideradas como el principal reservorio y vía de propagación de la enfermedad. En este sentido, alerta que profesionales, técnicos, criadores y población en general deben atender a las medidas preventivas y de control.
En una nota anterior, la entidad informó sobre algunas medidas de precaución como: notificar al servicio de sanidad animal más cercano si encuentra un ave muerta o enferma, evitar el contacto directo sin protección con aves que parecen estar enfermas o muertas; y no tocar superficies que pudieran estar contaminadas con excreciones o secreciones de aves silvestres, de corral o traspatio.