El mandatario estadounidense Donald Trump, ha presentado este miércoles una nueva batería de sanciones que pretende recortar aún más las fuentes de ingreso del gobierno cubano, y en las que no pocos analistas han visto una intención de asegurarse el voto más conservador de la Florida. En esencia, se les prohíbe a los estadounidenses alojarse en una larga lista de hoteles de la isla, a la vez que se pondrá mayor rigor a las importaciones de tabaco y ron provenientes de Cuba.