Si bien no pocos cubanos se han dado a la tarea de viajar a Rusia para comprar directamente partes y piezas de carros rusos como los de la conocida marca Lada, existe una empresa importadora dedicada a importar a Cuba y otros países de Latinoamérica esos componentes indispensables para mantener en movimiento buena parte de los vehículos que hoy circulan en la isla.