La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado que podría revisar próximamente sus recomendaciones sobre el uso de mascarillas (nasobuco). Según los resultados de un nuevo estudio del Ministerio de Industria y Tecnología de la Información (MIIT), las gotas emitidas con tos o estornudos pueden «viajar» por el aire a distancias mucho más amplias de lo que se pensaba.