Los congresistas de los Estados Unidos de América aprobaron el techo de deuda o gasto en el año 1917. Esta política, determina el tope de dinero que puede deber el gobierno norteamericano.
En la actualidad, el límite de la deuda es muy superior al implantado hace un siglo atrás. En estos momentos se debe una cifra mayor a $31 billones de dólares.
A partir del año 2001, los compromisos anuales se acercan a $1 billón de dólares. Esta situación, obliga a la administración a tomar finanzas prestadas para saldar sus deberes.
Con los préstamos que pide el país para solventar sus operaciones, se eleva el techo de gasto. En el mes de enero del actual año, el gobierno estadounidense llegó a la cima de la deuda.
Por tal motivo la secretaria del Tesoro, Janet Yellen alertó que se deberán tomar decisiones importantes para no caer en una crisis monetaria. La señora Yellen, agregó que se tendrá que legislar un incremento o suspensión del techo de gasto.
Con esta acción, las autoridades impedirían que se retrasen los acuerdos de pago. Janet Yellen recordó que la nación nunca ha incumplido con sus obligaciones.
Los gastos suben de manera reiterada
El plazo máximo para decretar una elevación de la deuda es el primer día del mes de junio de 2023. Los analistas piensan que en ese instante, al país se le acabará el presupuesto y acontecería una debacle en la economía nacional.
Las medidas que toma el Congreso para subir el techo de deuda son reiteradas a través de la historia estadounidense. En el pasado reciente se encuentra el último ejemplo, específicamente en el año 2021 con las leyes financieras para enfrentar la Covid-19.
Otra ocasión sucedió en el 2011 con Barack Obama. El mandatario estuvo obligado a aumentar el gasto, faltando dos días para que se vaciaran los fondos.
