La NDWA Labs aplicó una encuesta que recoge datos del mes de agosto del presente año. Arrojó que el 62% de la mano de obra doméstica norteamericana cobra por debajo de los $15.00 USD la hora. El resultado de este análisis es positivo si se compara con estadísticas pasadas que reflejaban un 70%. Lamentablemente continúa siendo una de las masas laborales peor remuneradas en Estados Unidos.
El Instituto de Política Económica (EPI) realizó un estudio sobre los sueldos en este sector y evidencia que tiene dificultad para solventar los meses. También está la posibilidad de los empleados domésticos a pertenecer a la clase más baja entre todos los que trabajan.
El 62% de los asalariados en viviendas particulares aseguran que no tienen la certeza de poder pagar la alimentación en las semanas venideras. Mientras que el 42% expresa la imposibilidad de sufragar la renta de habitaciones o deudas por créditos de hipotecas.
El desempleo es otro mal que perjudica
La comparación entre el desempleo en el área doméstica en los meses de julio y agosto es similar con un 23%. El 19% reclamó que no había podido trabajar ni una sola hora a la semana.
En el segundo trimestre del 2022, el número de desempleados es ligeramente inferior con el 20%. Sin embargo, dentro del personal que ejecuta el trabajo doméstico, hay una parte más vulnerable aún.
Las féminas latinoamericanas y afro descendientes sufrieron un alza de despidos en el octavo mes del año, superior al de los naturales. De 10 empleados en domicilios privados, 7 piden tiempos superiores para ejercer su oficio, ya que se encuentran con menos de 40 horas semanales.
En el último mes, 3 de cada 4 empleados domésticos han querido cambiar de trabajo. Los ciudadanos de habla hispana conforman la comunidad más pequeña con la mayor cantidad de trabajadores domésticos en Estados Unidos.