El Nuevo Herald informó que en la ciudad de Hialeah, Florida, se desarrolló un taller para imponer regulaciones a negocios de food truck. En este encuentro se abordaron nuevas propuestas sobre el estacionamiento y las formas de realizar las actividades gastronómicas de estos vehículos.
Si se aprueba una ley con estas transformaciones, los propietarios de los camiones de comida necesitarán una licencia para ejercer sus funciones. Estas personas tendrían que recibir dos controles al año, para tener la posibilidad de brindar servicios.
No obstante, la legislación fue aplazada por tiempo indefinido, con el objetivo de realizar otros talleres. Entre los debates, se escucharon las razones del concejal Carl Zogby.
Este señor explicó las dificultades de comercialización de cafeterías y restaurantes por estar cercanos a los food truck. Hace algunas semanas el alcalde Esteban Bovo opinó, que debe existir un equilibrio entre todos los locales con ofertas de alimentos.
Varias personas que asistieron al taller, consideraron que los food truck deben situarse a mil pies o más de distancia de los establecimientos fijos. Otro criterio consistió, en que los carros con comestibles solo podían trabajar luego de cerrar los restaurantes.
Quejas en otra ciudad de Florida
También en Florida, en la ciudad de Fort Pierce, se dictaminó en el año 2021 que era inconstitucional alejar los food truck de un lugar. La Constitución del estado asegura el derecho a trabajar de manera honesta y sin obstáculos del gobierno.
Las quejas sobre los food truck comenzaron en Fort Pierce en el 2014. El comisionado Edward Becht dijo que el motivo de retirar los puestos de comida era impedir la competencia con los espacios físicos.
La concejal Angélica Pacheco comentó, que al gobierno no le compete decidir sobre los asuntos comerciales de las empresas. Otra concejal, Mónica Pérez valoró la posibilidad de instalar los food truck en los parques de Hialeah.