Las autoridades policiales del condado de Broward, en el estado de Florida ofrecieron una recompensa a quien ayude a encontrar a los autores de un reciente robo de caballos. El hurto de dos potrancas ha conmovido a la opinión pública del norte de Miami. Los animales, luego de ser robados, fueron descuartizados. Por si fuera poco, los ladrones y matarifes vendieron su carne en el mercado negro.
La organización sin ánimo de lucro Animal Recovery Mision (ARM), confirmó la noticia. “Canela, de seis meses, y Venus, de dos años, fueron robadas el pasado viernes en la finca Southwest Ranches. Los individuos forzaron la cerca trasera de la propiedad ubicada en la zona de Rolling Oaks”.
El propio grupo, dedicado a la protección de animales, advirtió que existe una gran preocupación por el destino de Canela y Venus.
“Ellas fueron víctimas del comercio ilegal de carne de caballo en el mercado negro”. Junto a la policía, ARM ofrece una recompensa de $25 000.00 USD por cualquier información que conduzca al arresto de los responsables del robo.
Delito reiterado
Delitos con estas características se han vuelto frecuentes en el estado de Florida. De hecho, el robo de las dos yeguas se produce luego de que agentes de la policía encontraran restos de dos caballos tirados un canal. El hallazgo ocurrió en la ciudad de Homestead, condado de Miami-Dade.
Tanto la policía local como ARM mantienen una estricta vigilancia sobre casos de estas características en Florida. En la actualidad no existe en Estados Unidos ningún matadero autorizado para la venta de carne de caballo.
Kathleen Monahan, presidenta de la Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra Animales, SPCA, del sur de Florida se refirió al tema.
“Este tipo de delitos ocurre con demasiada frecuencia aquí en Miami-Dade, debido a la demanda de carne de caballo para su consumo. Muchas personas creen que tiene valor medicinal o cualidades mágicas”.