Las personas que tienen la ciudadanía en los Estados Unidos de América, pueden obtener beneficios mediante esta condición oficial. Los interesados en recibir el documento que acredita a un ciudadano estadounidense, tienen que ser residentes legales permanentes durante cinco años.
También se debe poseer la Green Card y demostrar que estuvo en la nación, sin salir por un tiempo superior a los seis meses. Los que tienen menos de 18 años de edad, tienen la posibilidad de optar por la ciudadanía.
Una alternativa para ellos, sería tener como padre a un ciudadano norteamericano nacido en el país o naturalizado. El Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) se encarga de procesar los pedidos de naturalización a través de la vía virtual con el Formulario N-400.
Los exámenes a enfrentar
Luego, el USCIS convocará la presencia del usuario para tomar sus huellas digitales y aplicarle pruebas de idioma inglés y educación cívica. Estos exámenes son realizados delante de un funcionario del USCIS y si el cliente desaprueba, se puede presentar nuevamente.
Sin embargo, las personas que necesiten evaluarse en cualquiera de las asignaturas antes mencionadas, deberán acordar otra cita. La decisión de concederse una nueva entrevista puede demorar entre dos y tres meses.
Si alguien desaprueba una vez más las disciplinas, entonces se retrasará su proceso de ciudadanía, porque deberá empezar la gestión por el principio. Esto significa, que el afectado presentará otro formulario N-400.
Las autoridades aconsejan, que los extranjeros busquen ayuda especializada en los temas migratorios para lograr de forma óptima la nacionalidad. Los inmigrantes deben tener la satisfacción, de que no perderán su estatus alcanzado por haber desaprobado las materias.
Además, el USCIS no pone límites de intentos para procesar la ciudadanía de los usuarios. Para las evaluaciones del inglés y la educación cívica, se mantienen dos convocatorias de presentación por cada solicitud de nacionalidad.