Este lunes Rusia lanzó una amenazante advertencia a Estados Unidos. Prometió represalias y acusándolo de estar implicado en la muerte de niños rusos tras un bombardeo ucraniano en Crimea. Un hecho militar llevado a cabo, según Moscú, con misiles proporcionados por Estados Unidos.
Rusia sostiene que Estados Unidos se ha involucrado en el conflicto ucraniano al permitir que Kiev utilice misiles de largo alcance contra territorios rusos y Crimea, región anexionada por Rusia en 2014 y utilizada como base militar para operaciones contra Ucrania.
Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, subrayó que la participación directa de Estados Unidos en el conflicto, resultando en la muerte de ciudadanos rusos, debe tener consecuencias. Peskov instó a los medios a cuestionar a los gobiernos de Europa y Estados Unidos sobre «por qué están matando a niños rusos».
Moscú afirma que Ucrania no podría realizar ataques con misiles ATACMS sin el apoyo técnico, tecnológico y de inteligencia de Estados Unidos. Desde hace tiempo, Washington y otros países europeos han autorizado a Kiev a usar armamento occidental para atacar objetivos militares rusos responsables de bombardear Ucrania.
Aunque la comunidad internacional rechaza la anexión de Crimea por parte de Rusia, Moscú considera esta península como parte de su territorio desde 2014.
Conflicto creciente
A principios de este mes, el presidente ruso, Vladimir Putin, amenazó con proporcionar armamento a enemigos de las potencias occidentales para que atacaran sus intereses globales.
El ejército ruso informó que el domingo las fuerzas ucranianas dispararon cinco misiles ATACMS, de los cuales cuatro fueron interceptados cerca de Sebastopol, donde se encuentra la base naval de la Flota rusa del mar Negro. Al menos cuatro personas, incluyendo dos niños, murieron y más de 150 resultaron heridas, según las autoridades rusas locales.
El lunes, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia convocó a Lynne Tracy, embajadora estadounidense en Moscú, para comunicarle las «medidas de represalia», argumentando que Estados Unidos está librando una «guerra híbrida» contra Rusia y ha pasado a ser parte del conflicto en Ucrania. Rusia enfatizó que los ataques autorizados por Washington en territorio ruso no quedarían impunes.
Rusia, que lanzó su ofensiva en Ucrania en febrero de 2022, prometió una respuesta a este reciente ataque. Para Ucrania, los ataques a objetivos militares en Crimea y dentro de Rusia son legítimos, especialmente bajo la presión de la escasez de personal y armamento que enfrenta Kiev.
Si es contra Crimea todo está permitido