El Servicio de Impuestos Internos (IRS) de los Estados Unidos de América aplica varios tributos a sus habitantes, como el impuesto al patrimonio. Este tributo es para las propiedades de los norteamericanos, en el instante del fallecimiento.
Este aporte fiscal es diferente al que se paga por la herencia y es posible que muchos estadounidenses puedan confundirlos.
Las contribuciones tributarias al patrimonio, se abonan previamente a la distribución de las riquezas de los difuntos. Sin embargo el gravamen de la herencia se deposita cuando los familiares del fallecido, obtienen los bienes.
Estas obligaciones fiscales se cumplen, al descontar una parte del patrimonio y después se entrega el resto de las pertenencias a los nuevos dueños.
El testador antes de su muerte, designa a una persona para que presente la declaración jurada de sus posesiones al IRS.
El tiempo que demora oficializar este trámite
Los ciudadanos responsables de esta acción pueden ser escogidos por un juez para concretar la voluntad del usuario que murió. Los elegidos para custodiar la fortuna del contribuyente muerto serán los encargados de repartir la herencia.
Estos representantes deberán supervisar los pagos para que se realicen en los plazos establecidos. La agencia federal autorizará a los albaceas y fiduciarios a entregar las propiedades a sus herederos, luego de comprobar que no existen deudas pendientes.
La directora de liquidación patrimonial del US Bank, Jessica Aycock informó que el IRS dispone de 3 años para legalizar la declaración de las propiedades. El IRS también tiene la potestad de ordenar una auditoría a las declaraciones del patrimonio.
La señora Aycock explicó que pueden transcurrir algunos años, para otorgar una evaluación definitiva del proceso de declaración de bienes.
Los interesados en conseguir informaciones y asesoría para estas cuestiones, deben buscar a los preparadores de tributos. Es importante que la población contacte al IRS, porque esta entidad recomienda a los mejores especialistas para resolver estos asuntos.