En Estados Unidos hay millones de contribuyentes que no presentaron su declaración de impuestos, aunque la presente temporada fiscal ya finalizó.
En tal sentido, el Servicio de Impuestos Internos (IRS) señaló que, aproximadamente 90 millones de personas habían presentado su declaración hasta el 29 de marzo.
Por tanto, todo parece indicar que cerca de 40 millones de personas no habían presentado su declaración, hasta esa fecha.
Resulta necesario aclarar que, quienes no presentaron su declaración recibirán multas por presentación tardía y por falta de pago de impuestos. A esto también se suman los intereses sobre la factura que no se pagó.
No obstante, quienes no deban impuestos o el IRS les deba algún reembolso, no tendrán ninguna multa por presentar tarde la declaración.
Ahora sí, los cálculos deberán ser exactos, porque de no calcular bien alguna factura, se tendrán que pagar las multas e intereses.
¿Qué otros inconvenientes traería no presentar la declaración de impuestos?
El primero de los inconvenientes es que el hecho de tardar en presentar la declaración también retrasará el recibo de un reembolso de impuestos.
Además, se debe presentar la declaración para recibir beneficios fiscales como el Crédito Tributario por Hijos (CTC) o el Crédito Tributario por Ingreso del Trabajo (EITC).
Por otra parte, de no hacerlo, el IRS presentará en lugar de los contribuyentes algo que se llama un sustituto de la declaración (SFR).
Aquí la agencia utilizará la información que tenga sobre sus ingresos mediante los formularios de impuestos W-2 y los formularios 1099 de terceros. De modo que, el IRS no incluirá deducciones ni créditos fiscales a los que puedan tener derecho.
Asimismo, también está la opción de pagar una factura fiscal y solicitar una extensión. Esto ayudará a detener las multas (no los intereses), presentar la declaración hasta el 15 de octubre o también recibir una devolución del IRS.
