Con los llamados food stamps del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) podrás adquirir varios productos cada mes. Con estos pagos directos tendrás la oportunidad de lograr una mejor dieta balanceada.
El programa SNAP envía sus pagos a través de la tarjeta de transferencia electrónica de beneficios (EBT). Aunque en algunos estados tiene otro nombre, esta tarjeta de débito te permite adquirir productos en supermercados, mercados de agricultores y otros puntos de venta minorista.
Como se conoce, los beneficios SNAP se destinan, generalmente, a la compra de alimentos básicos. No obstante, también cubren otros productos que, quizás, no sabías. En este caso se encuentran las semillas para plantas, el agua embotellada, las bebidas frías, los batidos sustitutivos de comidas, las proteínas en polvo y los mariscos vivos.
Del mismo modo existen varias restricciones sobre los productos que cubren los food stamps. Está prohibido adquirir alimentos preparados calientes, vitaminas, bebidas alcohólicas, comida para mascotas y artículos para el hogar.
Requisitos de elegibilidad para el programa SNAP
Si deseas recibir los beneficios del programa SNAP es imprescindible que cumplas los requisitos establecidos en cuanto a recursos e ingresos. Por ejemplo, todos los integrantes del hogar deben tener o solicitar un número de Seguro Social.
SNAP recuerda que los residentes permanentes que no sean ciudadanos estadounidenses también son elegibles. De ahí, que los padres pueden presentar una solicitud a nombre de sus hijos ciudadanos.
Al participar en el programa SNAP tendrás varios beneficios, como servicio de internet gratuito o de bajo costo. Todo ello, claro, además de la asistencia alimentaria correspondiente.
El programa SNAP incluye el acceso a hielo y a alimentos congelados. Tienes la posibilidad de adquirir hielo picado o en bloques mediante tu tarjeta EBT. Todos los productos que se pueden adquirir a través de los food stamps están disponibles, tanto en las tiendas físicas como en los centros online.
