Texas se enfrenta a una nueva ola de tormentas violentas que han dejado al menos un muerto y más de 600,000 hogares sin electricidad. Las comunidades de Dallas y Houston han sido especialmente afectadas por fuertes ráfagas de viento y lluvias intensas, generando un caos considerable.
El martes por la tarde, Houston registró ráfagas de viento de hasta 75 mph en el Aeropuerto Intercontinental George Bush.
Alrededor de 40 millas al noroeste, en Magnolia, una casa en construcción colapsó debido a las intensas tormentas, resultando en la muerte de un joven.
El Jefe de División de Bomberos de Magnolia, Jason Herrman, confirmó que el colapso fue causado por los vientos significativos de la tormenta.
Imágenes desde Houston y Dallas muestran escenas de inundaciones y destrucción. En el norte de Dallas, varios vehículos quedaron varados en calles inundadas, rodeados de frecuentes relámpagos.
En otras áreas, los vientos arrancaron árboles y derribaron cercas, dejando a las comunidades en un estado de desorden.
El número de cortes de electricidad comenzó a aumentar desde la mañana del martes en Dallas y se extendió hacia el sur conforme las tormentas avanzaban por el estado.
Las autoridades del condado de Dallas han emitido una declaración de desastre, advirtiendo que la restauración del servicio eléctrico podría tardar varios días.
Estos eventos climáticos extremos llegan mientras el estado aún llora a las víctimas de tormentas mortales durante el fin de semana del Día de los Caídos.
Al menos siete personas murieron en Texas, y en total, unas dos docenas de personas perdieron la vida en seis estados debido a las tormentas que azotaron el centro de Estados Unidos.
Avisos de granizos
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió sobre la amenaza de granizo grande, rayos y ráfagas de viento de hasta 80 mph. Así como la posibilidad de algunos tornados, afectando principalmente partes de Texas y el extremo oeste de Luisiana el martes.
La severidad del clima también ha afectado a cientos de viajeros, con más de 600 vuelos cancelados y 900 retrasos en los aeropuertos de Dallas-Fort Worth y Dallas Love Field. En Houston, los aeropuertos Hobby y George Bush Intercontinental también sufrieron cancelaciones y retrasos significativos.
El impacto en la infraestructura eléctrica es significativo, y los trabajos de reparación en áreas como Dallas y Houston implicarán reconstrucciones completas en algunos casos. El portavoz de Oncor, Grant Cruise, indicó que muchos de los daños no podrán ser solucionados con reparaciones simples.
Además, la combinación de altas temperaturas y falta de electricidad puede presentar riesgos de golpe de calor o agotamiento por calor para los residentes sin una forma confiable de enfriar sus hogares.
Las autoridades locales continúan monitoreando la situación y proporcionando actualizaciones conforme avanzan los trabajos de reparación y las condiciones climáticas evolucionan.